jueves, 26 de mayo de 2016

Un momento.

El paso del tiempo. La vida. Es como cuando haces tantas veces el amor con una persona que te conoces cada pliegue de su cuerpo, cada arruga de su piel, sus gustos, sus deseos.... Lo conoces todo y de repente un día te sorprende con algo totalmente nuevo. Diferente. Pero encaja. Y esa pequeña-gran novedad se incorpora a la dulce rutina de lo conocido. Y crece como una bola de nieve ladera abajo... y sonríes. Y te dejas llevar. como cuando dejas que el viento te sople y acaricie en la cara.